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Policiales

Gustavo Melmann: “Solo pedimos que los condenados cumplan su pena”

A 18 años del crimen de Natalia Melmann, Miramar volvió a marchar en reclamo de justicia por la joven asesinada, violada y torturada en 2001 y por la cual hay tres policías bonaerenses condenados, aunque con salidas transitorias.

Después de la marcha que se desarrolló por la peatonal 9 de Julio, su padre Gustavo Melmann tomó la palabra en el anfiteatro Lolita Torres y realizó declaraciones sobre la situación judicial de Suárez, Echenique y Anselmini. “Las pericias psiquiátricas dicen que no están en condiciones de reincorporarse a la sociedad. Pero no tienen ningún tipo de arrepentimiento, los hemos visto con Laura cuando estuvimos sentados en esa misma sentencia. Están mejor que nosotros”, indicó.

También expresó que “la cámara de casación indicó en octubre que los policías deben cumplir la condena hasta el último día que les corresponda, los 25 años. La cámara de apelaciones de Mar del Plata fue cómplice y no tuvo ningún reparo en decir que hasta que el fallo no quede firme en la Suprema Corte de la Provincia ellos sigan teniendo salidas transitorias, pateando la pelota para adelante”.

En su alocución, el padre de la joven de 15 años añadió que hay dos causas más: “una que nunca salió ni se quiso investigar que es el quinto ADN que no se quiso cotejar jamás y el juicio de Panadero (2018), que fue una burla porque no hubo ningún tipo de investigación ni se aportó ningún tipo de prueba”.

La concentración contó con presencia de diversas organizaciones locales y nacionales como la Multisectorial de Mujeres, Mumala y SUTEBA Violeta, además de los padres de Lucía Pérez y Sebastián Bordón. “Ahora tenemos que luchar con ustedes. Tendremos que hacer marchas y seguir hasta Provincia, hasta Diputados, hasta Senadores para tratar de sacar esta sentencia. No pedimos un día más, no pedimos pena de muerte, solo que cumplan los 25 años que les corresponden según la sentencia, aunque no deberían salir nunca más. Están saliendo sin custodia, sin control”, señaló Melmann.

“Hoy me tocó ir al cementerio y me encontré lleno de mariposas de colores. Hoy Natalia tendría el pañuelo verde y, como hubiera sido obstetra, estaría haciendo parir a miles de pibes”, concluyó.

/NG

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