El cadáver de Liam también fue sustraído del cementerio local

La Policía confirmó que el cadáver del pequeño que falleció en febrero tras ser aplastado por un televisor no está en el féretro. Se inició una causa por «averiguación de ilícito».

Las sospechas de una cuarta profanación con robo de cadáveres de menores de edad se confirmaron en la tarde de este lunes, cuando tras la exhumación judicial se comprobó que el cadáver de Liam Rodríguez (2) no estaba dentro de su cajón.

Liam falleció en los primeros días de febrero de 2019 en el Hospital Materno Infantil de Mar del Plata, después de un accidente hogareño donde fue aplastado por un televisor de tubo.

Según las consultas realizadas y corroboradas tras una fotografía capturada por el diario La Capital, cuatro días después de la sepultura se le realizó un cerramiento de material. Por ello se supone que el robo del cadáver se realizó en esos días, ya que el abovedado no fue adulterado desde mediados de febrero. La tumba se encuentra a pocos pasos del ingreso principal y oficinas del cementerio, con acceso sobre la izquierda.

En el primer rastrillaje por el caso Ciro Lescano (4 meses) se habían encontrado una camisa y un pantalón de jean. Noelia, la madre de Ciro, publicó esa foto en las redes sociales y los padres de Liam la reconocieron como propia, situación corroborada posteriormente ante la Justicia y por peritos especializados. Recién con esa prueba fehaciente se autorizó la exhumación.

Tras la prohibición de acceso al cementerio, que se mantiene hasta mañana por la mañana, el robo fue confirmado por la cúpula de la policía local en diálogo con la prensa allí presente.

Según los detalles a los que accedió EL DIARIO DE MIRAMAR, el féretro tenía un solo tornillo mariposa de los al menos cuatro que se suelen colocar en estos casos. A su vez, la madera no tenía daños ni roturas. La causa está caratulada como «averiguación de ilícito».

Intervino personal de la policía con base local, de la Sub-DDI, un miembro de la fiscalía local (ante la ausencia del fiscal de turno), bomberos y una ambulancia, que estuvieron atentos ante cualquier contingencia.

Sobre las 18, el intendente Germán Di Césare y la secretaria de gobierno María Eugenia Bove ingresaron al predio y acompañaron a la familia, con los cuales se retiraron cerca de las 19:30.

Cuarto caso confirmado en el distrito

El robo del cuerpo de Liam Rodríguez se suma al de Ciro Lescano (4 meses), descubierto el 17 de este mes.

A ellos hay que sumarles dos que acontecieron en el cementerio de Otamendi. El primero fue el de Matías Fernández, un pequeño de El Boquerón que falleció tras ahogarse con una bombucha. Fue sustraído en torno a la semana santa de 2017, y se descubrió porque fue el único de los cuatro casos donde apareció el cadáver, incluso antes de que sus padres descubrieran el faltante.

El otro fue el de Ciro Aranda, descubierto el 24 de diciembre de ese año. Sus padres fueron a verlo al depósito del cementerio cuando notaron que la tapa del cajón se movía y, a continuación, detectaron que el cuerpo no estaba en el féretro.

Aún no hay precisiones para ninguna de las cuatro causas. Cabe destacar que en todos los casos se trata de contravenciones, ya que el robo de cuerpos no entra en el Código Penal a menos que sea por una retribución económica. El proyecto para modificar la norma, impulsado por las dos primeras familias, está frenado desde abril de 2018.