La tradicional misa se desarrollará desde las 16 en Santa María del Mar. Previo a ella, se realizará la peregrinación desde 26 y 21.
En un año donde el trabajo se vuelve un tema fundamental, por problemática o ausencia, millones de argentinos se vuelcan a San Cayetano. Sea por pedir o agradecer, cada 7 de agosto el Santo es conmemorado en todo el país.
En Miramar, la programación será la habitual. A las 8 se abrirán las puertas de la capilla Santa María del Mar (Avenida del Mar y Juan Chapar, Parquemar) para aquellos que se quieran acercar a la imagen.
A las 15, la intersección de 26 y 21 será el tradicional punto de encuentro para comenzar la peregrinación por la avenida hasta el templo. Desde las 16, el padre Alberto celebrará la Santa Misa y, a su término, habrá chocolate caliente y tortas.
Desde la Secretaría Parroquial, sugieren llevar como ofrenda un alimento no perecedero, «para entregar con amor a los más necesitados».
La historia
Gaetano Thiene nació en octubre de 1480 en Vicenza, República de Venecia, en el seno de una familia de nobles. No obstante, abandonó el ambiente familiar y dedicó su vida a la atención de los enfermos y desvalidos.
Cuenta la crónica de su vida que, siendo sacerdote, estaba un día en oración cuando tuvo una visión en la cual se le aparecía la Virgen que le ponía al Niño Jesús en sus brazos. Por eso se lo representa llevando al Niño.
En Roma fundó una congregación de clérigos, conocida como la de los Teatinos, por haber sido su primer superior Juan Pedro Carafa, que a la sazón era obispo de Teati, y después fue elegido Papa con el nombre de Paulo IV.
San Cayetano, llamado el «Santo de la Providencia», murió en Nápoles el 7 de agosto de 1547. El papa Clemente X lo proclamó santo en 1671, después de que una comisión eclesiástica comprobó numerosos milagros entre quienes lo invocaron para pedir sanación, alimentos y trabajo. De allí que se lo considere el patrono del pan y del trabajo.