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Política

Ianantuony asumió su segundo mandato como intendente con novedades en algunas secretarías

Vujovich toma juramento a Ianantuony (Comunicación Social MGA)

Acompañado por su familia, Sebastián Ianantuony renovó este miércoles su cargo como intendente municipal del Partido de General Alvarado por el período 2023-2027, luego de haber resultado electo por la mayoría de los vecinos en las elecciones del 22 de octubre.

Entre el público presente en el Polideportivo Néstor Kirchner se destacó al diputado provincial y exjefe comunal, Germán Di Cesare, entre otros primeros exmandatarios locales, anteriores presidentes del Concejo Deliberante, entidades no gubernamentales, concejales, consejeros escolares y vecinos que se acercaron a compartir la jornada.

El acto comenzó con la sesión preparatoria del Honorable Concejo Deliberante para que Ianantuony pudiera efectuar su juramento. Luego de realizado y tras palabras de buenos augurios por parte de los presidentes de los diferentes bloques del HCD, se tomó juramento a los secretarios, con algunos cambios de jerarquía de áreas ya existentes:

  • Secretaria General y de Gobierno: Belén Battenti
  • Secretario de Obras Públicas: Martín Scarpignato
  • Secretario de Economía: Pablo Ramajo
  • Secretario de Salud: Mauricio Besteiro
  • Secretaria de Desarrollo Humano: María Laura Banús
  • Secretaria de Educación y Cultura: Sofía Pusterla (nueva repartición, retiene a la actual Dirección de Cultura)
  • Secretario de Turismo y Deportes: Alejandro Frezzia (sucede a María Eugenia Bove, deja de incluir a la Dirección de Cultura)
  • Secretario de Producción: Federico Meaca
  • Secretario de Derechos Humanos: Fernando Bisciotti
  • Secretario de Seguridad: Paulo Rodríguez (se jerarquiza de subsecretaría a secretaría, ingresa el excomisario al rol tras la salida de Jorge Núñez)
  • Delegado en Otamendi: Andrés Ferreyra
  • Delegado en Mar del Sud: Gabriel Sendra
  • Delegado en Mechongué: César Candia

El discurso completo

Intendentes con mandato cumplido, expresidentes del Concejo Deliberante, autoridades políticas, eclesiásticas, educativas y de la sociedad civil, nuestros queridos Veteranos de Malvinas, vecinas y vecinos, Tengan todas muy buenas tardes.

Culminando el año 2023, en el marco de los 40 años ininterrumpidos de democracia, asumo hoy con gran alegría esta hermosa responsabilidad de ejercer mi segundo mandato como intendente. Quiero agradecerle a cada uno de los vecinos que a través del voto popular me han honrado con esta nueva posibilidad de conducir los destinos de las y los ciudadanos de General Alvarado.

Como servidor público, es mi deber, entender el mandato de las urnas, comprender y atender las necesidades y exigencias de una comunidad que revalidó su confianza en esta gestión. En tiempos en donde se debate el rol del Estado y su capacidad transformadora del cotidiano de las personas, ustedes eligieron un gobierno que puso a lo Público al servicio de los vecinos.

A pesar del descrédito sostenido e intencionado que ha sufrido la Política, no puedo dejar de mencionar que los grandes logros que nos identifican como país, provincia y municipio surgieron de la decisión de ser un Estado Presente. Que la Política sea hoy una mala palabra, es algo bueno para los malos políticos.

Las universidades públicas son un orgullo. Que todos los ciudadanos tengan acceso a la salud y a la educación pública, gratuita y de calidad, es un orgullo. Los derechos de los trabajadores conquistados en todos estos años, son un orgullo.

¿Esto quiere decir que NO hay que mejorar al Estado? Claro que hay que mejorarlo, por supuesto que hay que hacerlo. El estado tiene que, invariablemente, ser más eficiente. Pero no es con su ausencia que se resuelven los problemas de la gente.

A quienes votaron por esta gestión en la búsqueda de un Estado que esté en ese lugar, quiero decirles que se queden tranquilos. Los contextos nacionales no nos harán claudicar en las consignas que elegimos defender.

Tendremos que ser aún más creativos. Tendremos que buscarle todavía más la vuelta. Tendremos que ir a golpear las puertas que ya golpeamos. Y tendremos que ir a la búsqueda de otras puertas a golpear. Nada de esto nos da ni timidez, ni pereza. Eso hicimos en el primer mandato y eso vamos a seguir haciendo a partir de mañana y en los días que vendrán.

En este periodo 2019-2023 atendimos lo urgente, situaciones que no soñamos que podían ser reales, atravesamos las dificultades, pero no perdimos de vista lo importante: la gente SIEMPRE va primero.

Tomamos decisiones muy difíciles y teníamos que hacerlo muy rápido, pero cuando las convicciones son firmes está claro cuál era el rumbo a seguir. En este primer mandato tengo la tranquilidad y la alegría de haber cumplido con aquello que me comprometí hacer.

Incluso logramos cosas que nos parecían lejanas, pero que estaban en el acervo colectivo de nuestra comunidad hace tiempo. Encabezo una gestión que creyó y cree en la Educación. Porque creo que en la Educación está el futuro.

Tengo claro que todo lo que hagamos en esta materia no tiene en su mayoría efectos inmediatos. Pero estoy seguro que deja huellas profundas en las generaciones por venir y construye ciudadanía. Tengo claro que el futuro es de nuestros jóvenes. Es decir, debemos ocuparnos hoy de su futuro. Son el Presente y el Futuro.

Por eso, gracias a las políticas implementadas, ampliamos las carreras que se dictan en el distrito, inauguramos nuevas escuelas primarias y secundarias, trajimos por primera vez la universidad y para los estudiantes que cursan en la ciudad vecina de Mar del Plata brindamos facilidades en el transporte.

Hemos hecho todo esto y mucho más para lograr que la educación, primaria, secundaria y de nivel superior esté al alcance de todos. Apoyamos el desarrollo del talento deportivo y el nombre de nuestros atletas y de nuestras ciudades alcanzó reconocimientos importantes en lugares lejanos.

En el plano de la cultura, logramos poner en valor lo que se viene desarrollando a través de las bienales de arte que ya cumplieron 10 años de vigencia, y fue gracias a esto que Miramar pasó a ser Capital Provincial del Arte a cielo abierto gracias al impulso en el Congreso Provincial del Diputado Germán Di Cesare.

Pero no nos detuvimos ahí, recientemente abrimos la primera escuela de artística del distrito, que formara a los artistas del mañana y dará las herramientas para potenciar su energía creadora. Estamos en la era de la economía del conocimiento, y hacia allí dirigimos nuestros esfuerzos, equipando con notebooks en las escuelas, trayendo la diplomatura de la UBA en Sistemas y generando un entramado de oferta académica en distintos establecimientos educativos.

También dedicamos nuestros esfuerzos para que en nuestro distrito se instalen empresas que generen y agreguen un valor genuino a los recursos que componen nuestro suelo.

Posicionamos a la ciudad con turismo todo el año y eso permitió romper la estacionalidad. Programas como los viajes de egresados o los incentivos al turismo doméstico fueron posibles gracias a los distintos niveles del Estado que también acompañaron al distrito.

Por efecto de estos programas tuvimos comercios, hoteles y restaurantes con ocupación plena en épocas que no son las frecuentes. No fue casualidad que en el sector de la construcción tuvimos Pleno Empleo a partir de la obra pública y la privada. Un hito histórico que nos impulsa a buscar lo mismo en otros sectores. Llevamos adelante una gestión con una clara visión en que tener una vivienda otorga a las familias la base de la igualdad de oportunidades y la seguridad de su posteridad.

Muchas de ellas están cumpliendo el anhelo de la casa propia. A ellos les digo: vamos a seguir gestionando y darlo todo para concluir hasta la última vivienda que tenemos en construcción.

Al campo pudimos darle infraestructura, conectividad en caminos, acompañar las producciones tradicionales como la papa que en Otamendi que obtuvo su Fiesta Nacional, pero también impulsar cultivos más recientes como el kiwi y apuntalar la producción avícola, como uno de los proyectos con mayor potencial de empleabilidad de la zona.

Logramos darle impulso a una industrialización, que aún es incipiente, pero que es un camino por el que hay que seguir estimulando la inversión privada en pos de la generación de empleo local, de calidad y bien remunerado. Logramos también que este desarrollo se acompañe con más infraestructura de servicio, como con la repotenciación eléctrica en particular de Mechongué y de Mar del Sur. Esto generará nuevas oportunidades para el desarrollo y arraigo de nuestra gente en sus lugares de origen.

Miro hacia atrás y pasan miles de imágenes por mi cabeza de todos los logros que conquistamos como comunidad. En este punto, quiero agradecer a mi familia por haberme acompañado en esta aventura y haberme sostenido en todo momento. A mi mujer, Débora, a mis hijos Santiago y Nicolás, que son a los que quito tiempo para darme a la comunidad. Quiero decirles un Enorme GRACIAS. Nada de esto hubiera podido lograr sin el amor de ellos.

Gracias también a la Militancia, el corazón de nuestro movimiento. Son quienes han dedicado su tiempo para llevar nuestro mensaje con pasión, que salieron a repartir la boleta casa por casa, poner afiches, pintar pasacalles, darnos charlas sobre lo que cada uno sabe, tocar el bombo cuando hay que hacer ruido, pero debatir acaloradamente y con pasión cuando es preciso escucharnos. Ustedes son los que vencieron la ley de la gravedad como nos encomendaron nuestros conductores.

No tengo dudas, en esta ocasión alcanzamos la mejor militancia. Y tenemos que sentir orgullo de eso. Pero también recordar siempre y que sirva de guía en momentos de confusión: nada puede lograrse sin UNIDAD. Y para que haya unión, debemos pensarnos colectivamente. Reparar en la doctrina que nos guía. Seguir construyendo el Proyecto, y no hacer tantos reparos en las personas.

Tanto Alfonsín como Perón tienen frases similares sobre poner en primer lugar las ideas, luego las cosas y recién después las personas.

Es para mí necesario agradecer la conducción de Sergio Massa que asumió con actitud patriótica la responsabilidad de llevar adelante el Ministerio de Economía en el momento más complicado de nuestro país, arriesgando su propia carrera y sus aspiraciones en pos de lo colectivo.

También agradecer a nuestro Gobernador, que no solo ha estado presente en incontables ocasiones en nuestro distrito asistiendo y resolviendo, sino que nos ha permitido el proceso de transformación más importante que ha experimentado Gral. Alvarado en términos de obra pública.

De cara a lo que viene, sin dudas transitamos horas aciagas luego de los anuncios en materia económica que se expresaron desde nuevo gobierno nacional. Estos tienen un efecto directo sobre la clase media y sobre los más humildes. En suma, la clase trabajadora.

Lo anticipamos. Intentamos advertirlo de todos los modos posibles. Pero no fue suficiente. Y no está permitido quedarnos en la comodidad del «yo lo dije». Ahora deberemos defender a nuestra gente de las consecuencias de lo que viene. Y con las herramientas que tengamos a la mano, salir a la calle a aliviar el padecimiento de nuestra gente.

Pero más allá de la elección del gobierno a nacional, en el distrito los vecinos eligieron revalidar una gestión que ha mostrado la capacidad para poder transformar y que ha demostrado estar cerca. Porque hacemos política y diseñamos política pública de cara a la gente.

Se abren tiempos donde el diálogo se vuelve indispensable. Quiero pedirle, una vez más, a todas las fuerzas políticas que recorramos el camino de la construcción de los consensos. De resolver nuestras diferencias en el marco del respeto y siempre teniendo como guía que los ciudadanos nos confiaron la representación para alcanzar el bien común.

Se vienen tiempos en los que se pondrá a prueba nuestro sentido de grandeza. Y espero que desde la Política estemos a la altura.

Se vienen tiempos donde deberemos obligadamente, todos, ser mejores. Entender que debemos trascender nuestras singularidades en pos de un destino común superador.

A mis funcionarios les digo. El rol que se les ha confiado y por el que han jurado, no es un lugar de privilegio. Es un lugar de responsabilidad. Es un lugar de amor profundo por nuestra comunidad. Y no hay opción a tener que dar el 100% de cada uno de nosotros. Otra cosa no será admitida.

Hoy asumo renovar esta responsabilidad. Porque cumplí. Yo sí creo en el Estado. En un Estado más ágil, que le haga más fácil la vida a la gente. Es momento de profesionalizar la atención a nuestros ciudadanos.

Está probado que somos capaces de lograr grandes cosas, y en la medida que estén las oportunidades, las seguiremos haciendo. Pero si en el día a día la ciudadanía se encuentra con más dificultades de las que pretendía resolver, no estamos cumpliendo con nuestro compromiso de ser servidores públicos.

Es por eso que quiero una gestión eficaz, agilizando los procesos, que haga reingeniería de procesos de manera permanente y tenga perspectiva de mejora continua. Que tenga el foco puesto en resolver los problemas de los vecinos.

Para eso aplicaremos tecnología. Para tener una municipalidad de puertas abiertas, cercana, que no expulse, que acompañe. Quiero que los vecinos sean parte de la toma de decisiones. Como ya lo hicimos en más de una oportunidad. El Presupuesto Participativo es una herramienta de gestión comunitaria y tenemos que profundizarla.

Quiero un Municipio que tenga perspectiva ambiental y que genere desarrollo con inclusión, siendo respetuosos de nuestra Casa Común y de la cultura de lo permanente.

En definitiva, quiero una mejor municipalidad. Cuando en la campaña hicimos los debates en las escuelas, recuerdo que una de las preguntas que me hicieron los chicos fue «¿Para qué quiero ser intendente?»

Quiero compartirles lo que les contesté: Me propongo ser intendente porque quiero un General Alvarado productivo, inclusivo, que potencie el talento de sus vecinos y los transforme. Porque siento orgullo por mi distrito y quiero que impulsemos todo aquello que nos hace sentir de esa manera.

Porque tenemos un potencial enorme, que solo será una realidad efectiva si trabajamos en equipo lo público y lo privado. Logrando las mejores síntesis y dinamizando nuestros recursos para generar bienestar en nuestra población. Quiero ser Intendente porque quiero impulsar una gestión que viene a estar al servicio de la gente. Hagamos todos juntos un distrito en el que nos dé orgullo vivir.

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